Dolor, llanto e incertidumbre, fueron los sentimientos emergidos por los familiares y amigos del joven asesinado este martes a las 8:00 de la mañana, en el Centro Comercial Los Pinos, de la zona industrial Los Pinos, Puerto Ordaz.
A simple vista se pudo apreciar que el infortunado presentaba un disparo a la altura de la espalda; aunque, testigos aseguran que escucharon dos detonaciones. Allí estaba sin vida, Ángel Eduardo Prieto Lugo, de 23 años, Ingeniero Civil y egresado – hace más de un año- de la Universidad Católica Andrés Bello ( Ucab), extensión Guayana.
Hipótesis del caso
A unos 25 metros aproximadamente, estaba su carro Toyota Corolla, color plateado, placa FBM75Z, la puerta de atrás del lado del chofer había quedado abierta y alrededor, dos casquillos y un proyectil de 9 milímetros.
A esa distancia, se observaron gotas de sangre salpicadas que conducían hasta donde había caído el joven profesional, lo que dio indicio a los investigadores que al parecer este corrió tras ser tiroteado. El primero en ver al fallecido fue el vigilante del centro comercial, pues dijo que luego de escuchar los disparos se alertó y corrió donde se emitían los sonidos. No vio a nadie.
El hombre indicó que no vio ningún vehículo sospechoso por el lugar, solo se percató del cuerpo de Ángel desplomado al suelo. Al cabo de varios minutos, el lugar estaba rodeado de curiosos; entre ellos, compañeros de trabajo de la víctima que observaban atónitos aquella escena fatal y que nunca se borrará de sus memorias.
Cicpc indaga
De acuerdo a la información recabada, Lugo terminaba de llegar para cumplir con su labor como todos los días en Disaica. Tenía menos de un año en esa organización, así lo detallaron sus otros colegas. Uno de los presentes se comunicó con el padre vía telefónica, y con un nudo en la garganta, tuvo la responsabilidad de manifestarle la desgracia.
El progenitor cuando llegó inmediatamente partió en llanto. «Dios mío no puede ser posible. Hijo, ¿qué te pasó?» entre lágrimas expresó.
Su madre, venía llegando de Puerto la Cruz, de donde había sufrido un accidente de tránsito el lunes, afortunadamente, sin consecuencias mayores.
La escena del crimen era custodiada por funcionarios de la Policía del estado Bolívar (PEB), mientras esperaban la llegada de la comisión del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas (Cicpc) para levantar el cadáver. Asimismo, analizaron todas las evidencias.
Curiosamente, después que los pesquisas requisaron al occiso, las llaves del vehículo no se encontraron, es decir- según las autoridades- la intención de los criminales no era del todo llevarse el Corolla. Aunque en principio se manejaba el robo como móvil, no descartaron la venganza.
Zona peligrosa
Varios de los locatarios de la zona industrial Los Pinos, manifestaron su descontento por el abandono de las autoridades en este sector. «Lamentablemente ellos empiezan a cumplir con sus funciones después que ocurre una desgracia como esta», sentenció uno de los informantes.
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