El Cardenal Jorge Urosa Savino rechazó la violación de derechos humanos en Venezuela y reivindicó el deber de la Iglesia Católica, de defender la vida.
La afirmación la hizo en el sermón que ofició ayer domingo de Ramos en la Catedral de Caracas, donde destacó la importancia de que se investiguen y sancionen de acuerdo a las leyes venezolanas las presuntas violaciones a los derechos humanos, especialmente en las cárceles de nuestro país.
«Rechazamos la violación a los derechos humanos, principalmente en los juicios a las personas que están detenidas por motivos relacionados con actividades políticas».
Señaló que los detenidos en las manifestaciones contra el Gobierno desde el año pasado, deben ser juzgados en libertad, y no estar presos «como si fueran unos asesinos».
El representante de la Iglesia hizo énfasis en los feminicidios e infanticidios. «Ha habido en los últimos años un crecimiento terrible de homicidios y asesinatos. Han crecido los asesinatos contra la mujer y niños».
Fustigó las llamadas religiones paganas a las que consideró incompatibles con Jesucristo y la Iglesia. «No podemos ser santeros y católicos, cultores de ídolos y amar a Jesucristo. Está muy claro que un católico no puede ser santero y un santero no puede ser católico ni comulgar».
También rechazó el aborto provocado al considerarlo como el asesinato de un niño en el vientre de su madre. Resaltó la importancia de fortalecer la familia y el matrimonio como instituciones necesarias para lograr una sociedad ideal y en paz.
«Debemos trabajar por la paz y el cese a la violencia. La fe hay que tenerla en el corazón. El católico debe estar dispuesto a perdonar, ayudar al prójimo y no a pegarle un tiro a una persona que me miró mal…Debemos ser coherentes con el respeto a la vida», indicó el cardenal Urosa Savino, ante una iglesia Catedral llena de feligreses.
Agregó que debemos amar a la familia y que cada hogar sea un ambiente amoroso. «La familia debe ser unida, no solo en la celebración de la Semana Santa 2015, si no siempre».
SISTEMA TOTALITARIO
Antes, en el programa Diálogo Con.., por Televen el cardenal Jorge Urosa Savino manifestó su preocupación por el «totalitarismo» que pretende ser impuesto desde el Gobierno. «El problema no es la oposición, sino el Gobierno que con todos los recursos que tiene quiere implantar un totalitarismo», y criticó el manejo inadecuado de recursos. «La corrupción apesta, como dice el Papa. No hay dólares para alimentos porque hay una corrupción inmensa», indicó.
Reiteró que la implantación de un sistema marxista- comunista no es una «opción viable» para los venezolanos. «Toda la dirección de la política del Gobierno va en el control absoluto de los elementos de la vida social y económica por parte del Estado, eso es totalitarismo marxista; fundamentalista, un sistema ideológico cerrado como es el socialismo-marxista. Lo que nosotros le planteamos al Gobierno es que ese camino es un camino fracasado que no le conviene a Venezuela», afirmó.
Reiteró que los problemas que enfrenta el país afectan por igual a todos, incluida la iglesia católica, por lo que hizo un llamado a la unión en la búsqueda de una solución.
JUSTICIA Y FRATERNIDAD
El cardenal Jorge Urosa Savino dijo que «queremos el bienestar del venezolano, que haya libertad, prosperidad, convivencia, justicia, fraternidad», y reiteró que la iglesia ha estado dispuesta a la mediación para la solución de conflictos. Sin embargo, no ha habido buena recepción por parte del Gobierno.
Precisó que «la iglesia católica padece todas las dificultades que padece el pueblo venezolano, pero no solamente eso, nosotros queremos el bienestar del venezolano, que haya libertad, prosperidad, convivencia, justicia y fraternidad».