¿Cómo son los empleados venezolanos?
Hoy en día el perfil del trabajador venezolano, se relaciona mayormente con las habilidades y características personales, que con sus conocimientos y experiencias.
¿Qué aspectos positivos podemos resaltar?
El venezolano es un trabajador que puede lucir atento y respetuoso con sus superiores y compañeros. Le resulta natural la solidaridad. También posee una relativa capacidad para trabajar sostenidamente, en condiciones difíciles, lo que se presenta como una situación bastante generalizada. Tiende a ser curioso y a dar ideas.
En muchos casos, tiene la capacidad para trabajar en equipo, pero requiere de un buen liderazgo, que sepa motivarlo y sacarle el máximo de sus potencialidades. El trabajador venezolano se caracteriza por su colaboración ante su equipo de trabajo.
También puede responder positivamente ante el incentivo, busca oportunidades. Es emprendedor. En muchos casos, especialmente cuando existen condiciones apropiadas, se identifica con su empresa, lo que se demuestra en el respeto que este sostiene por las estructuras y normas internas y ello puede derivar en cierta lealtad, por parte de los trabajadores hacia su jefe, a sus compañeros y a la empresa, así como a su propia familia y país.
Por otra parte, suele ser creativo, si se le da la oportunidad. Requiere buenos estímulos.
También podríamos destacar que acepta largas jornadas laborales, aunque no por demasiado tiempo
Ellos valoran la capacitación, como una forma de movilidad laboral, y como una forma de disminuir la incertidumbre e inestabilidad. También valoran la capacitación como herramienta útil para el uso de nuevas tecnologías.
El trabajador venezolano posee la capacidad de negociar y defender sus intereses.
¿Que podríamos resaltar entre sus características negativas?
Destaca una negativa tendencia al alto ausentismo, llegando al abuso de reposos médicas. En este sentido no demuestra responsabilidad ni madurez.
Las largas jornadas laborales a las que puedan estar sometidos, no están relacionadas con mayores índices de productividad en la empresa nacional.
Los trabajadores no son tan obedientes y tienden a cuestionan las decisiones del supervisor. No son buenos, en general, para tomar decisiones y asumir responsabilidades. Existe poca capacidad de análisis. No son proclives a los cambios.
Existe poca flexibilidad para las tareas en la empresa. El trabajador no está dispuesto a realizar un trabajo que no se encuentra específicamente definido dentro de sus responsabilidades. Suelen generarse roces y conflictos ante solicitudes de trabajo que ellos consideren que no están en su descripción de cargo.
El nivel de conflicto puede ser alto en muchas empresas, la colaboración entre trabajadores y empresarios, tiende a la baja y la imagen mutua suele ser negativa.
Los trabajadores tienen poca empatía y fraternidad grupal. Velan mucho por sus intereses y eso los lleva a ser relativamente egoístas
Suelen ser personas dedicadas y dispuestas a aprender nuevas labores, pero requieren estrecha supervisión para asegurarse el riguroso cumplimiento de las nuevas tareas. Son poco meticulosos en los resultados de su gestión. En general no cuidan la calidad de su trabajo. Se conforman con trabajos a medias. Puede privar la conformidad y pasividad
No poseen pensamiento estratégico. Son poco capaces de adaptar el trabajo individual en pro de la misión empresarial.
Suele ser frecuente que posean muy poco respeto hacia los plazos convenidos. Tienen demasiada informalidad sobre planes, programas y fechas de entrega de tareas y compromisos laborales. Desdeñan la planificación y destaca su improvisación
Los trabajadores jóvenes son poco constantes, no tienen hábitos. No poseen una cultura laboral, en general.
En conclusión, el trabajador venezolano tiene grandes cualidades positivas y de igual manera, aspectos negativos que requieren adecuada observación y acertados programas para ser superados.
Insisto en una máxima que recorre el mundo. Los líderes excelentes son aquellos que son capaces de sacar lo mejor de su gente, que ponen en marcha acertados programas de formación, que saben interpretar el sentir y las expectativas del personal y los que perseveran en mejorar la actuación de sus trabajadores. Allí está el reto!!!!
Hasta la próxima semana. Gracias por leerme. email:ywpalacios@cantv,net
Waldo Negrón
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