A Alexander Natividad Ávila, de 26 años, le asestaron tres puñaladas este viernes a las 7:00 de la noche.
Aunque fue trasladado hasta el Instituto Clínico Unare, murió mientras recibía atención médica.
El crimen se reportó a escasos metros de la licorería La Cascada de Unare, en Puerto Ordaz.
Según la versión de su madre, al joven lo mataron cuando esperaba un transporte que lo llevara hasta su casa, ubicada en el sector San Jacinto de la vía que conduce a Ciudad Bolívar.
Supuestamente una mujer y un hombre llegaron sin previo aviso a la zona y, en cuanto lo vieron, comenzaron a agredirlo.
Ninguno de sus acompañantes resultó herido, por lo que las autoridades presumen que Alexander era el objetivo de los asesinos.
Los verdugos escaparon tal y como llegaron: a pie. Una comisión de la Policía del estado Bolívar (PEB) “peinó” el lugar, pero para entonces no quedaban ni las huellas.
Trasciende que el fallecido deja tres hijos y salió desde la mañana a buscar un dinero.
Por la forma en cómo transcurrieron los hechos, los efectivos del Eje de Investigaciones de Homicidios de la Subdelegación Guayana intuyen un solo móvil: la venganza.
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