Durante los últimos días los casos se han incrementado vertiginosamente y al parecer, no hay respuesta por parte de las autoridades competentes.
Pues según las víctimas, siguen sintiéndose desprotegidos y aislados de las acciones de seguridad que deberían tomar los cuerpos policiales de la localidad.
Una residencia de la calle F en la urbanización Los Saltos, en Puerto Ordaz, fue el escenario escogido por un grupo de hampones que lograron burlar a la seguridad del conjunto y entremezclarse con los moradores, para delinquir plácidamente.
Nadie logró notar la irregularidad, ni siquiera el oficial de vigilancia.
Los fechores se marcharon con una de las camionetas de la víctima y salieron usando una tarjeta que solo la poseen los habitantes de Los Saltos.
Exactamente a las 9:43 de la noche del miércoles, cruzó la portería del urbanismo la camioneta Ford Explorer Limited, color blanco, matrícula AEN826GD con destino desconocido.
El delincuente bajó el vidrió de la máquina que iba full con el botín, accionó el código de propietario y huyó.
LA SORPRESA
Fue hasta la mañana de este jueves cuando la señora encargada de la limpieza llega al domicilio y se encuentra con el desastre.
Los tipos no dejaron huellas de violencia en los portones principales de la vivienda, presuntamente también tenían control de acceso e ingresaron con total normalidad.
Estando adentro de los predios, si se vieron obligados a romper una de las puertas de madera, no sin antes “voltear las cámaras de seguridad” que vigilan los alrededores de la casa.
Se estima que en menos de una hora consumaron el sucio plan.
Cargaron con joyas, dólares y bolívares en efectivo, oro, un arma de fuego, televisores plasmas y las pantallas del sistema de seguridad.
Fuentes policiales presumieron que los hampones conocían perfectamente el lugar y los escondites, como si anteriormente hubiesen estado en la casa.
INVESTIGACIÓN
La casa se encontraba sola para el momento en que los criminales perpetraron el hecho y se sospecha que hasta eso lo sabían.
Este jueves en horas de la tarde, una comisión policial se presentó en la residencia y detuvo en calidad de investigada a la encargada de mantenimiento y limpieza. Fue identificada como “Dalila”.
Hasta ahora no hay muchos datos sobre los rateros pues fueron hasta astutos para eliminar evidencias que los expusiera ante cualquier investigación.
Sin embargo, se presume que los bandidos que ingresaron a una de las casas de la familia Morgado tienen vínculos con empleados de su prestigiosa empresa, que por alguna razón y en cierta ocasión fueran encomendados a cumplir labores en la referida residencia.
LOS “ROBA QUINTAS”
Arivana, Los Saltos, Las Querencias, Villa Granada, Chilemex, entre otros, son solo algunos de los sectores que se han convertido en “blanco fácil” para que los delincuentes cometan sus crímenes deliberadamente.
Al parecer las instituciones policiales se han enfocado en las zonas rojas de Guayana, dejando desguarnecidos a ciertos urbanismos que viven a diario el azote de criminales que ahora se dedican a robar quintas y desvalijar carros, en comunidades más favorecidas.
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