Los tipos se colaron hasta el interior de la residencia sin levantar mayor sospecha y cuando tuvieron a su “presa” en frente, no titubearon en accionar el arma un par de veces hasta asegurarse de haber cumplido su macabro plan.
Cerca de las 3:00 de la mañana de este lunes, los tentáculos de la muerte tocaron a otra familia guayanesa. Esta vez, fue en el sector Chirica Vieja, en San Félix, donde unos pistoleros –movidos por la venganza- acabaron despiadadamente con la vida de Moisés Ramón Brown Moreno, de 42 años.
La escena fue como de película. La esposa y sus dos hijas, ocupaban la habitación junto a Brown y fueron testigos presenciales de la arremetida, las féminas atónitas intentaron reanimar al masculino pero no hubo nada por hacer.
Los detectives del Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (Cicpc) iniciaron las averiguaciones correspondientes pero de entrada, aseguran que se trata de un caso de venganza. Los gatilleros obedecieron a la orden de un autor material: debían arrancarle la vida a Moisés.
Los bandidos huyeron sin dejar rastro en el perímetro y aunque algunos vecinos se asomaron alarmados por el sonido de las detonaciones, no hubo quien se atreviera a describir a los asesinos.
No obstante, el trabajo de los sabuesos de la policía científica logró un reconocimiento preliminar de los verdugos y se espera durante las próximas horas, dar con su paradero.
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