Ultimado hombre en La Lucha

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Una noche tranquila se convirtió en tragedia cuando sujetos desconocidos segaron la vida de un hombre, que hoy deja en la orfandad a dos hijos, uno de cinco y otro de siete años.
Aproximadamente a las 8:30 de la noche del lunes, Jhonatan José Carrasquel Martínez, de 30 años, se encontraba con su padre viendo un juego de béisbol cuando decidió salir al frente a fumarse un cigarro mientras conversaba con dos vecinos, Richard y Oscar.
José Carrasquel, padre de Jhonatan, explicó que pasaron aproximadamente quince minutos cuando escuchó múltiples detonaciones, de inmediato quiso salir a ver qué pasaba. Cuando estaba llegando a la puerta de la residencia escuchó los últimos tres disparos, por lo que se regresó, pero recordó inmediatamente que su hijo estaba afuera y salió a ver dónde se encontraba. Al salir no podía creer lo que veían sus ojos, el cuerpo de su hijo yacía en el suelo, por lo que lo tomó entre sus brazos, donde expiró su último aliento. El occiso presentó varios impactos de bala en el rostro y el pecho.
Algunos residentes del sector relataron que los homicidas iban a bordo de una camioneta blanca doble cabina y otros aseguraron que fue un sujeto que iba a pie, quien disparó y salió en veloz carrera.
Los amigos que acompañaban a Jhonatan fueron alcanzados por los proyectiles, Richard González recibió tres impactos de bala en el brazo, pierna y abdomen. El mismo ingresó al servicio de emergencia del hospital de Guaiparo. Mientras que Oscar presentó una herida en una de sus piernas. De este ciudadano no se tiene mayores datos, se presume que sus familiares lo llevaron trasladaron a un centro clínico privado.

ERAN PERSONAS TRANQUILAS
El padre del occiso indicó que es la primera vez la violencia deja víctimas en el seno de su familia. Destacó que su hijo era un hombre sano y trabajador, era albañil y trabajaba con él, informó que tanto Richard como Oscar son personas tranquilas que no tienen problemas con nadie. Familiares no se explican por qué los delincuentes arremetieron contra esos tres inocentes que no tienen problemas con nadie y mucho menos están implicados en asuntos delictivos.