Una camisa de fuerza

0
690

 

Un gobierno de transición, de unidad nacional, permitiría que todos los procesos electorales sigan su curso, y en dos años el mundo entero sabrá qué es Venezuela.

Para Jesús Seguías el conflicto político que reina en la actualidad deriva en que la Constitución Nacional ya no le sirve al oficialismo.

“Se ha convertido en una camisa de fuerza para el Gobierno. El Presidente está desvariando; no atina a generar resultados en ningún aspecto”, refiere de entrada el presidente de Datincorp, quien recordó aquella frase de Albert Einstein “Si buscas resultados distintos, no hagas siempre lo mismo”, en alegoría a los frecuentes errores políticos y económicos que han colocado a los venezolanos en una encrucijada.

Y es que considera que el Gobierno está “conectado al paleolítico del socialismo. Perdió el control, desde las cárceles, y aún hay tres personas en el entorno del Presidente que le están dando el norte estratégico izquierdista. Siento que estamos en una locura”.

¿Cómo desmantelarla? Seguías parte de que 70% de los venezolanos rechaza la gestión gubernamental y 55% de los chavistas quiere seguir en el gobierno pero sin Nicolás Maduro.

“Se definen marxistas – leninistas como en la dictadura del proletariado. Creen en la lucha de clases, llenas de odio y resentimiento social. Todo eso es incompatible en un sistema democrático, porque no creen en la cohabitación política”.

Con todo el poder de coacción acumulado, Seguías menciona que el chavismo estuvo en otra dimensión. Pero tras la muerte de Chávez, que lo dejó sin liderazgo, este gobierno no gana otra elección.

Por ello, critica severamente que esta convocatoria de ANC de carácter sectorial sea para crear una constitución a la medida.

“El Gobierno tiene en contra tres factores: la activación de los ciudadanos, el apoyo internacional cada vez más creciente y firme, y tienen a la AN que, le guste o no, es un factor importante sobre todo a nivel internacional. El Gobierno podrá desconocer a la AN pero internacionalmente es totalmente legal, y por eso ni los chinos se han atrevido a dar un dólar más a Venezuela. Y nadie nos dará préstamos”.

Esos tres factores, confiesa, tienen al gobierno en una situación precaria para la gobernancia.

“La oposición, por su lado, tiene grandes dificultades, pues no tiene el control de la FANB, ni de las gobernaciones y alcaldías; tampoco de los poderes públicos, ni las policías, ni Pdvsa. De manera que el escenario político está medio equilibrado, y ninguno podrá pulverizar al otro. Ninguno va a poder gobernar sin el otro. El chavismo no va a poder gobernar si no tiene a la AN cohabitando con ellos en condiciones normales”.

“Pero si la oposición llegase al poder, duraría unos meses y a Venezuela le pasará como a Argentina, cuando en 2 años hubo varios gobiernos distintos porque no se ponían de acuerdo. El estado de anarquía no es bueno para el país”.

“A estas alturas lo que nos queda, si no hay alternativas al entendimiento y a la negociación, el único desenlace posible en términos correctos es la conformación de un gobierno de unidad nacional, de chavistas y opositores donde queden a un lado los factores intransigentes y extremistas, y en dos años logremos recuperar la producción nacional, vengan los inversionistas y comenzar a superar la crisis”.

Para Seguías, quien documenta desde hace 30 años el comportamiento social, la economía y la seguridad ciudadana son los factores que han llevado el mayor peso en el sufrimiento de los venezolanos en este momento.

“El chavismo y la oposición deben entender que no tienen juego. El chavismo no puede gobernar toda la vida, ni la oposición estar en la calle sin resultados. Que ninguno podrá pulverizar al otro, y una vez que entiendan, lo demás será más fácil”.

EL TRASFONDO

Jesús Seguías es gente, y como muchos no está dispuesto a aceptar lo que está viviendo. “Ojalá fuese una constituyente convocada en términos correctos. ¡Bingo! Ahí se resuelven los problemas del país. Pero meter la trampa de las elecciones sectoriales, es una agresión a la Constitución y a los venezolanos”.

Según su experiencia, el Gobierno tomó hace tiempo la decisión de gobernar bajo la premisa leninista de que una minoría bien organizada y armada es mayoría. “A ellos no les importa un bledo si el país los apoya o no los apoya. Se quedan en el gobierno porque sí, aun en contra de la voluntad soberana del venezolano. Eso es condenable, es un delito”.

“En este momento, cuando están en una crisis muy grande, quedan al desnudo. Aquella idea de que eran los más democráticos porque convocaban a elecciones, fue la máscara ante el mundo”.

Cuestiona la rapidez con la que actuó el CNE para tomar la palabra del Presidente de la República. “Están convocando en tiempo récord esta ANC. ¿Por qué el CNE no convocó el año pasado las elecciones de gobernadores? ¿Qué mayor evidencia de que el CNE depende del Gobierno? A Tibisay Lucena y a Maikel Moreno les digo, no sean estúpidos, porque el día que venga un juicio, los van a pagar ustedes y no Nicolás maduro. Nicolás jamás será enjuiciado por los delitos cometidos por el TSJ, el CNE ni las FAN. No sean tontos útiles”.

Manténte bien informado y recibe nuestro resumen de noticias. Únete al grupo de WhatsApp o canal de Telegram  Síguenos en Instagram: @eldiariodeguayana