Expresaron que temen por las condiciones de sus parientes que recientemente fueron trasladados a otros centros penitenciarios del país como parte de la Operación Gran Cacique Guaicaipuro
Familiares de los reclusos que fueron evacuados del Internado Judicial Vista Hermosa, en Ciudad Bolívar, durante el operativo Gran Cacique Guaicaipuro, se concentraron este lunes en las afueras del Palacio de Justicia, en Puerto Ordaz.
Exigen a las autoridades judiciales la celeridad en los casos de los privados de libertad que fueron trasladados y aguardaban por la audiencia preliminar.
Protestantes aseguraron que se les hace cuesta arriba poder cumplir con gastos de papeleo y traslado hacia los centros penitenciarios del territorio venezolano, donde se encuentran actualmente sus parientes.
Una de las afectadas relató que su esposo fue trasladado para Mérida, y a su vez expresó su preocupación y temor por las condiciones en las que estaría su compañero sentimental. «Estamos aquí a la par de Dios, orando a Díos y pidiéndole que guarde a nuestros familiares».
La mujer contó que su esposo fue condenado a seis años de prisión, de los cuales ha cumplido cuatro. «Lo último que le faltaba a él era que la jueza firmara la prueba psicosocial, pero no lo ha hecho», expresó.
Elsa Guilarte, otra de las afectadas, mencionó que su hijo fue trasladado hasta Barinas, al igual que los demás, expresó su temor y catalogó de «cruel e inhumano» el traslado que se hizo recientemente como parte del Operativo Gran Cacique Guaicaipuro que se llevó a cabo en varios centros penitenciarios de Venezuela.
«Queremos que se pronuncien los tribunales con respecto a cada uno de nuestros familiares, no es justo este traslado cruel e inhumano. Cometieron una falta, están pagando lo que hicieron, pero muchos de los que están ahí también están en proceso y ni siquiera se les ha comprobado que delito tienen», enfatizó.
Declarantes que han tenido que pasarle dinero a sus parientes para que costeen gastos de comida y aseo personal.
Asimismo, aseguraron que, en caso de no recibir una pronta respuesta llegarán hasta las instancias nacionales. «Si tenemos que ir al Tribunal Supremo de Justicia en Caracas, iremos. Si tenemos que marchar a Miraflores, vamos. Porque son nuestros hijos, son nuestros familiares y a nosotros nos duelen», concluyeron. Rosangely Bruces
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